Estudio: El ataque a Irán sería el comienzo «de una guerra larga» y podría enviar los precios del petróleo por las nubes

Global Research , 15 de julio 2010

by Daniel Tencer

La respuesta de Irán a un ataque podría enviar los precios del petróleo por las nubes, sostiene un think tank.

Un ataque israelí contra Irán no lograría detener el presunto programa de armas nucleares de Teherán  y daría lugar a una larga guerra «que estaría marcada por la inestabilidad económica y el gran número de víctimas civiles, según el estudio de un think tank británico.

En un informe (PDF) publicado el miércoles, el Oxford Research Group afirmó que si bien la probabilidad de un ataque de EE.UU. contra el programa nuclear de Irán ha sido reducido por las políticas de la administración Obama, los avances en la tecnología militar israelíes han aumentado las posibilidades de un ataque israelí.

El estudio, titulado «la acción militar contra Irán: Impacto y Efectos», también sostiene que un ataque contra las instalaciones nucleares de Irán impulsaría al público iraní a seguir la dirección del Presidente Mahmoud Ahmadinejad y dar al régimen de Teherán más apoyo y fundamento para el desarrollo de sus capacidades nucleares .

«Una administración iraní bajo ataque experimentaría una considerable  unidad nacional que trabajaría rápidamente para volver a desarrollar sus programas de armas, retirándose del TNP y dando prioridad a las armas nucleares», señala el informe.

Como resultado de ello, el estudio llegó a la conclusión de que Israel se vería obligada  a atacar en varias ocasiones las instalaciones iraníes «, dando como resultado  un conflicto prolongado – el comienzo de una larga guerra con potenciales consecuencias regionales y mundiales.»

Además, el informe – escrito por Paul Rogers, profesor de estudios sobre la paz en la Universidad de Bradford – sugirió que cualquier ataque israelí contra Irán podría causar un gran número de bajas civiles porque los ataques israelies probablemente no se limitaría a las instalaciones nucleares.

Israel «golpearía fábricas y centros de investigación y laboratorios de universidades, incluso, con el fin de hacer el mayor daño posible a la experiencia iraní  que sostiene el programa», dijo Rogers en un comunicado de prensa . Cualquier intento de Israel para neutralizar las instalaciones nucleares de Irán «probablemente incluirán los intentos de matar a los tecnócratas que manejan los programas de misiles nucleares de  Irán».

«Habría muchas víctimas civiles, tanto de forma directa entre las personas que trabajan en los programas de misiles y nuclear, como también sus familias cuando sus viviendas sean alcanzadas, además de secretarias, limpiadores, peones y demás personal en las fábricas, estaciones de investigación y departamentos universitarios» Rogers dijo.

La ORG sostiene en su informe que Irán tendría muchas opciones en represalia por un ataque contra sus instalaciones nucleares. La principal de ellas sería la capacidad de Irán de bloquear el estrecho de Ormuz, el estrecho cuerpo de agua que separa el Océano Índico del Golfo Pérsico, a través del cual los petroleros de Oriente Medio tienen que viajar. Si Irán bloqueara el Estrecho, los precios del petróleo subirían dramáticamente en todo el mundo.

Irán también podría poner en marcha «ataques de misiles y/o paramilitares» en instalaciones de procesamiento de petróleo en el Oriente Medio, y podría empezar a apoyar a grupos que luchan contra la presencia de EE.UU. en el vecino Afganistán e Irak.

A principios de este mes, el presidente Barack Obama firmó una ley con una nueva ronda de sanciones de EE.UU. contra Irán, tras los pasos de una cuarta ronda de sanciones impuestas al país por la ONU.

Si Irán está planeando la construcción de armas nucleares ha sido un tema de controversia durante años. Mientras que Irán asegura que su programa nuclear es exclusivamente para fines pacíficos, los legisladores israelíes han descrito como una amenaza existencial «para el pequeño Estado judío.

El informe de ORG dice que Irán  «desarrolla despacio las tecnologías y el personal para que pueda manejar una gama de sistemas relacionados con lo nuclear». Si el país decidiera utilizar esas capacidades para fabricar armas, se necesitarían de tres a siete años para que produzca seis armas utilizables.

«No hay evidencia firme de que tal decisión haya sido tomada, pero la naturaleza de los últimos proyectos de construcción reciente, especialmente los subterráneos, sugiere que la dirección es tener la capacidad, aunque se mantiene en reserva en lugar de aplicarse, «indica el informe.

El Oxford Research Group se describe como «una organización no gubernamental independiente y de caridad social, que trabaja en conjunto con otras para promover un enfoque más sostenible a la seguridad para el Reino Unido y el mundo.» No está afiliado a la Universidad de Oxford.

Daniel Tencer es un colaborador frecuente de Global Research.